Los “martillos” que llevan años trabajando para lograr un juego de placas se muestran indignados y sólo piden que de las diez concesiones se les dé a los que las merecen o simplemente que se revoquen y se le finquen responsabilidades a Henry Sosa.
Las concesiones que se le otorgaron a Edgardo Baeza, actual delegado de la CODEHY y ex oficial mayor del anterior gobierno, a Jesús Martín Casanova y a su esposa, ex chofer del ex alcalde Mario Peniche Cárdenas y director de Alumbrado Público, al primo “incómodo” de Peniche Cárdenas y actual funcionario de la Secretaría de Política Comunitaria Freddy Cárdenas; al hijo de Wilberth Silva Tamayo, mercader de la política y vival chantajista, a Juan Villanueva actual funcionario del gobierno de Gonzalo Escalante; a Antonio Tejero, primo hermano del subdirector de la Policía local a Marvin Azcorra secretario particular de Peniche Cárdenas, al Dr. Orestes Somarriba ex director de Salud de Mario Peniche y quien renunció a media administración, son los nuevos taxistas. Todos ellos sin haber trabajado un solo día en un taxi y ni siquiera pertenecido a algún sindicato del mismo gremio.
Para que sean aceptados en el Sindicato de Taxistas “Adalberto Aguilar Osorio”, el secretario general Narces Alcocer, suegro de Edgardo Baeza el defensor de los derechos humanos, medió el diputado federal Liborio Vidal Aguilar quien sutilmente “ayudó” a conseguir que entren a ese gremio sólo para tener entre sus barajas el as con el que amarraba a Mario Peniche a sus caprichos.
Trascendió que el director de Transporte del Estado Henry Sosa, pidió de gratificación diez mil pesos, según comentó Willy Silva a sus allegados y Narces Alcocer en una asamblea dijo que habían diez nuevas concesiones, pero nunca explicó de los beneficiarios.
Incluso, para asustar a su gremiales dijo que “si no vienen esas 10 concesiones para nosotros, se van a otro sindicato y tenemos mayor competencia”. La asamblea accedió a regañadientes con la promesa de que cada juego de placas pagaría 25 mil pesos.
Pero Willy Silva se encargó de contarle a sus amigos que en realidad Narces Alcocer pidió 40 mil pesos e ingresó 25 mil para el sindicato y el resto lo dividió con su yerno Edgardo Baeza. Narces Alcocer fue solicitado para que dé una entrevista relacionada con el caso y solo se limitaron a decir “que no tiene nada de qué hablar”.
Los sindicalizados del volante calificaron los hechos como una injusticia, “algo que no debería estarse viviendo en un Estado en el que se supone se está combatiendo la corrupción desde distintos frentes”.
Indignados, los taxistas indicaron que ellos están en la lista para ser beneficiarios de una placa desde hace muchísimos años, por ello procuran estar al corriente de sus cuotas sindicales y se parten el lomo día a día conduciendo un taxi como “martillos”, pero de manera increíble, resultan beneficiados un grupo de corruptos funcionarios.
Enojado por la noticia de los nuevos propietarios de las placas, el taxista Wilberth Alcocer Guillermo (perteneciente al sindicato “Adalberto Aguilar Osorio”) destacó que las acciones son reprobables y pidió el asunto sea investigado detenidamente.
Mencionó que “muchos de nosotros tenemos antigüedad, además existe un supuesto escalafón que debe ser respetado… no se vale que las placas se otorguen por compadrazgo o amiguismo, y lo peor, sin que ninguno de los cinco ex funcionarios sea siquiera taxista”.
De igual forma, el joven Josué Dzib Puc (también del Sindicato “Adalberto Aguilar Osorio”) precisó que el otorgamiento de las placas representa una clara violación a los derechos laborales de infinidad de trabajadores del volante “y algo que no debe ser tolerado por las autoridades estatales”.
“Debe averiguarse desde dónde se extienden los lazos de corrupción para que se haya beneficiado a los ex funcionarios y los responsables deben ser removidos de inmediato de sus cargos, revocando también las placas otorgadas. Nosotros que estamos en el gremio no tenemos placas y éstos solo por recibir el espaldarazo de alguien lo consiguieron… es una verdadera injusticia”, destacó indignado.
Se trató de entrevistar a Narcés Mendoza en relación a los hechos, pero argumentó que estaba saturado de chamba.
“El hecho es inmoral”
Enterado de la situación, el propio Fernando Fernández Arzápalo, quien ocupó el cargo de regidor en la administración encabezada por Mario Peniche Cárdenas definió la situación como un hecho inmoral.
“Yo considero que se les está quitando la oportunidad a los trabajadores del volante que han hechos muchos méritos para en un momento dado obtener una placa, y ello sea un patrimonio de ellos y su familia”, acotó.
Culminando la entrevista, el también profesor mencionó que “como funcionarios y como servidores públicos, entramos a los ayuntamientos a servir al pueblo, ya que devengamos un sueldo que debemos justificar con nuestra responsabilidad y nuestro trabajo. Por ello calificó los hechos como algo inmoral, “algo con lo que desde luego no puedo estar de acuerdo, lo digo de una manera franca y clara, y también se lo digo a ellos, que todavía son mis amigos… piénsenlo, analícenlo, están a tiempo, tomen la decisión y cédanles las placas a alguien que realmente lo necesita por ser esta la única oportunidad para el sustento de su familia”.
La comunidad pide al actual presidente municipal Gonzalo Escalante Alcocer remueva de su cargo a Jesús Martín Casanova, actual director de Alumbrado Público y Juan Manuel Villanueva Zapata, actual coordinador general.
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